El aire de un avión puede ser tan limpio como el de un hospital, pero esa máxima no se aplica necesariamente a las superficies de cabina. Como todo lugar por el que pasan cientos de personas al día, los aeroplanos-y también los aeropuertos-se convierten en focos de gérmenes y bacterias. En la mayoría de los casos, no son peligrosos para nuestra salud, salvo si sufrimos una deficiencia inmunitaria o tenemos una herida abierta, pero nunca está de más llevar con nosotros toallitas desinfectantes para asegurarnos de que los bichitos no nos fastidien las vacaciones. ¿Cuáles son las superficies más sucias?. No siempre son las que a priori imaginaríamos. El lugar donde se acumulan más gérmenes es la mesa donde se apoya la bandeja de la comida. Así que la próxima vez que viajes en avión, ya sabes qué es lo primero que tienes que limpiar antes de empezar a comer.
Noelia Osés Hoya
Periodista Escolar